Una periodista, LDT, de El Universal, invita por estos días a convocar a nuestra mente imágenes surrealistas con esta nota de página roja —sección que, nunca aclarado de manera más oportuna, leo como primera cosa en la mañana, prácticamente cuando me desayuno.
Analizando el pelón, imagino su origen en la intromisión de algún programa informático de corrección, pero esto no me tranquiliza del todo (¿qué palabra corrigió, después de todo, el software? ¿sereales? ¿O fue ceriales?).
De cualquier manera, agradezco el tropezón mental que me provocó, porque me hizo recordar una serie de cómics de la que leí en los tiempos de apartado postal en Miami e importación a mansalva de libros, cedés y revistas. La trama iba de un misterioso asesino que estaba eliminando, uno a uno, a todos los personajes protagonistas de las cajas de cereal (el Tigre Tony, Sam el Tucán, por ejemplo). No logré encontrar imágenes de esa serie, pero encontré otra de un cómic de tema similar, que reproduzco: Cereal Killers de Kreepsville Industries, una serie enajenada de reinterpretaciones horripilantes de los caracteres de las cajas de desayuno.
martes, 12 de diciembre de 2006
Suscribirse a:
Entradas (Atom)